ANIVERSARIO DEL LANZAMIENTO DE LA BOMBA ATÓMICA EN HIROSHIMA

Hoy 6 de agosto, en el 80 aniversario del lanzamiento de la primera bomba atómica sobre Hiroshima, nos unimos a la llamada a la paz de tantos seres humanos que buscan y trabajan por una vida más digna y fraternal, y en especial al llamamiento del papa León XIV en este día a superar la lógica de la disuasión nuclear: “Espero que, en el mundo contemporáneo, la seguridad ilusoria basada en la amenaza de la destrucción mutua ceda el paso a los instrumentos de la justicia, a la práctica del diálogo y a la confianza en la fraternidad”.
 
Y en su carta a Monseñor Alexis M. Shirahama, Obispo de Hiroshima, recuerda a toda la humanidad: “Aunque han pasado muchos años, las dos ciudades siguen siendo recordatorios vivos de los profundos horrores causados por las armas nucleares. Sus calles, escuelas y hogares aún llevan cicatrices—visibles y espirituales—de aquel fatídico agosto de 1945. En este contexto, me apresuro a reiterar las palabras tan frecuentemente usadas por mi querido predecesor el Papa Francisco: “La guerra es siempre una derrota para la humanidad”.”.
“la guerra es siempre una derrota para la humanidad” porque provoca muerte, sufrimiento hambre e injusticias a los pueblos que la sufren directamente y suponen un fracaso para toda la humanidad. Por eso el rearme masivo, el incremento y modernización de los arsenales atómicos no son una solución para la paz “En efecto, la verdadera paz exige el valiente acto de deponer las armas—especialmente aquellas que tienen el poder de causar una catástrofe indescriptible. Las armas nucleares ofenden nuestra humanidad compartida y también traicionan la dignidad de la creación, cuya armonía estamos llamados a salvaguardar.”, escribe el papa al obispo de Hiroshima. 
Hoy es un día para el recuerdo, pero necesitamos que sea un recuerdo activo que nos lleve a buscar soluciones para la paz y la justicia en “nuestra casa común”, que el Príncipe de la Paz, nuestro Señor, nos guíe en nuestra búsqueda y en nuestras actuaciones.