RESPETO A LOS DERECHOS DE LOS INMIGRANTES

 

    Tras la campaña de la Mesa por la Hospitalidad reclamando a las Administraciones un plan para atender las necesidades de las personas migrantes, en especial las que llegan solicitando asilo, en el mes de enero conocimos la situación en que se encontraban una parte de estas personas en el aeropuerto de Barajas: suciedad, falta de alimentos, suelo por cama y hasta chinches. Cruz Roja, para denunciar esta situación, se retiró de la atención de estas salas de reclusión. Durante unos días esta situación llenó todos los medios de comunicación. La solución del gobierno fue que los migrantes senegales que hagan tránsito en Barajas precisarán de visado, como coloquialmente se dice: "muerto el perro se acabó la rabia".

    El día 17 de febrero, de nuevo la Mesa por la Hospitalidad, de la que Justicia y Paz forma parte, se hizo eco de la denuncia interpuesta por CIEs NO, de la que forman parte Pueblos Unidos y el Observatorio Samba Martine, (las únicas organizaciones autorizadas a entrar en el Centro de Internamiento de Emigrantes de Madrid, reabierto hace podo más de dos meses), por las presuntas agresiones a internos, y emitió un comunicado  del que  se hizo eco la Mesa por la Hospitalidad en su web, el 17 de febrero. En dicha nota se indica:

"Tan sólo dos meses y tres días después de la reapertura del centro de internamiento de extranjeros de Madrid, las personas internas denuncian haber sufrido agresiones por parte de varios agentes de la Policía Nacional."

    Igualmente se denuncia lo que los internados les han contado sobre su alimentación y las instalaciones:

"Por último, explican que existen otras deficiencias en el funcionamiento del centro como la escasez de comida o de mantas y hacen alusión a otras cuestiones que quisieran denunciar directamente en persona por temor a sufrir represalias."

    Justicia y Paz tiene como uno de sus objetivos principales la defensa de los derechos humanos, de ahí que no podamos callarnos ante las injusticias que se comeneten con las personas migrantes que llegan a Barajas y las que se encuentran internadas en los CIEs y cuyo único delito ha sido tratar de encontrar una vida digna.